Información

El término municipal de Castellón tiene una superficie dedicada a la agricultura de aproximadamente 9500 hectáreas, de las cuales 8500 hectáreas son de regadío y 1000 de secano. En cuanto al regadío 3500 hectáreas pertenecen a la Comunidad de Regantes del Pantano de Mª Cristina, del que obtienen el agua que esporádicamente embalsa el citado pantano que se nutre de las escorrentías de la Rambla de la Viuda y del poco caudal que aporta el río Lucena y que desborda del pantano de L´Alcora. A parte, dicha comunidad recibe también agua del río Mijares a través del canal de la cota 100 en su margen izquierdo y de algunos pozos.

Otras 3000 hectáreas corresponden a la Comunidad de Regantes de Castellón, también llamado Sindicato de Riegos de Castellón. Se trata de una comunidad de riego tradicional, con más de 800 años de historia y que se nutre para sus cultivos, exclusivamente del río Mijares a través del Azud de Santa Quiteria que deriva el agua en su entrada a Castellón por la acequia Mayor.

Los cultivos más importantes son, en las zonas de secano, los algarrobos y los almendros, estando estos cultivos prácticamente abandonados en los últimos años debido al escaso rendimiento en la actualidad de estos cultivos.

En cuanto a las zonas de regadío, el cultivo estrella es, sin duda alguna, los cítricos, aunque también existen algunas parcelas dedicadas a las hortalizas, principalmente: alcachofas y tomates, además de melones, escarolas, puerros, apios, lechugas, pero en menor cuantía.

Actualmente el término municipal de Castellón está en total transformación ya que, debido al ataque de una enfermedad de los cítricos denominada "tristeza de los naranjos", los cultivos han tenido que sufrir una total reconversión. Así los agricultores han tenido que sustituir los denominados naranjos de pie amargo, que era el tipo de árbol más común por otros pies tolerantes a la enfermedad de la tristeza.

Otra de las revoluciones más importantes que ha sufrido la agricultura en Castellón ha sido la transformación en los sistemas de riego tradicionales por modos más modernos. Esto ha supuesto la sustitución de los canales y acequias por tuberías de presión, lo que ha llevado a los agricultores a cambiar el tipo de riego popular "a manta" (por inundación), por otros sistemas de riego localizado, como son el riego por goteo, microaspersión, exudación, etc.

Esta circunstancia ha supuesto, no solo un cambio en el sistema de riego y la modificación de las costumbres de trabajo de la tierra, sino también en un cambio de mentalidad en el cultivo, ya que, paralelamente se utiliza la red de riego localizado para incorporar los nutrientes, como el abono, directamente al agua y de allí a la planta. Eso ha significado un importante ahorro en mano de obra y, por otro lado, también una importante mejora en el medio ambiente, debido a que el consumo del agua y abonos se ha reducido en un 40%.

En cuanto a los tipos de cítricos que se cultivan en la zona, las variedades más comúnmente cultivadas son del tipo Mandarina, que, en este caso son las que mejor se adaptan a las condiciones del suelo y al microclima de la zona. Las hay de variedades muy precoces como Oronules o Marisol, entre otras, hasta de producción muy tardía como las Fortuna. Pero, sin lugar a duda, la verdadera reina de los cítricos castelloneros es la Clemenules, que es la más comúnmente cultivada.

Aprovechando el cambio de riego y de variedad, se está también modificando la estructura de las líneas de cultivo. Así cada vez más se incrementa la distancia entre líneas de plantación y entre árboles, lo que está permitiendo la mecanización del cultivo, con su consiguiente proyección hacía un futuro donde la agricultura no sea un trabajo manual, sino que pueda realizarse sin la dureza que le ha caracterizado desde siempre.

La comercialización de las naranjas castellonenses se centra principalmente en el consumo propio y a exportación a países europeos y norteamericanos ...

 Naranjo

Naranjo

Plan de Reactivación Agraria


 

La Concejalía de Transición Ecológica del Ayuntamiento de Castelló ha diseñado junto al Consejo Municipal Agrario y de Sostenibilidad un Plan de Reactivación Agraria para impulsar la recuperación del sector primario como articulación de un proyecto de ciudad transformador, que refuerza la conservación y puesta en valor del cinturón verde periurbano de la ciudad y rompe con la destrucción del territorio, ofrece una alternativa económica con producción y comercio de proximidad, y mejoras en el bienestar general (en calidad del aire como imbornal de C02 y en alimentación).

El sector agrario está pasando por las dificultades de falta de relevo generacional, presión urbanística, falta de rentabilidad, etc. y, en consecuencia, el abandono de los cultivos. En la franja periurbana de la ciudad de Castelló la incidencia de este abandono es especialmente alta.

El Plan de Reactivación contempla seis grandes políticas de intervención en la cadena de producción, distribución y comercialización del sector agroalimentario, que empujan su transformación hacia formas de producción agroecológicas y canales cortos de comercialización. El contenido se ha llevado a cabo en el seno de la Comisión de Reactivación Agraria del Consejo Municipal Agrario y de Sostenibilidad. Previamente, la Concejalía desarrolló estudios previos; un informe que muestra la situación del parcelario rústico, y un diagnóstico con las necesidades del sector.

El sector afronta además un contexto que se presenta como una oportunidad para su reactivación. Por un lado, hay un cambio de paradigma, en el cual la agricultura y la ganadería son una prioridad de los fondos de recuperación postcovid de la Unión Europea. Y en segundo lugar, el nuevo Plan General protege 2.000 hectáreas de suelo rústico en el cinturón verde.

Los seis grandes objetivos son:

  1. Facilitar el acceso al uso y la propiedad del suelo agrícola a través del banco de tierras
  2. Fomentar la comercialización en canal corto y mercados de venta directa que facilito un justo precio para los productores
  3. Generar una marca de producto local que facilite a los consumidores la identificación de los productos del término de Castelló
  4. Ofertar formación agraria que permita la incorporación de nuevos productores al sector y la modernización de los existentes
  5. Poner en valor la importancia ecosistémica de la agricultura respetuosa con el medio ambiente
  6. Dignificar la figura de las personas labradoras como figura clave en la soberanía alimentaria de la ciudad

Puedes consultar un documento resumen del Plan de Reactivación

Fira de la Taronja

​​​​​​​​​​La "Fira de la Taronja" de Castelló de la Plana es una iniciativa promovida por el Excmo. Ayuntamiento de Castelló de la Plana que, con el apoyo de varias asociaciones del sector agrario local, pretende apoyar al sector citrícola del municipio, promover el consumo de cítricos entre la población, generar canales cortos de comercialización que reduzcan la impronta ecológica del consumo alimentario y proporcionar precios justos para los agricultores y agricultoras.

La idea fundamental de la Feria es proporcionar a los agricultores y agricultoras la posibilidad de ofrecer, de forma directa y sin intermediarios, sus productos al consumidor/a final, así como promover el consumo.

La venta directa o los canales cortos de comercialización de los productos agroalimentarios por parte del productor/a primario/a o del pequeño/a elaborador/a agroalimentario/a es una forma de diversificar las fuentes de ingreso de las explotaciones agrícolas y ganaderas; también contribuye a incentivar la creación de microempresas asociadas al ámbito rural, y al mismo tiempo, ofrece a los consumidores y consumidoras se productos de proximidad.

La Feria tendrá lugar todos los domingos en la Plaza Fadrell de 09.00 a 13.30 horas. En caso de superarse el aforo máximo establecido en estas ubicaciones el Ayuntamiento habilitará otros espacios.

Su funcionamiento se enmarca en la regulación establecida por el Decreto 201/2017, de 15 de diciembre, del Consejo, por el cual se regula la venta de proximidad de productos primarios y agroalimentarios.

FIRA DE LA TARONJA 2023-2024:

Abierto plazo para presentar solicitud hasta el 15 de septiembre de 2023, incluido.

Bases y solicitud de participación "Fira de la Taronja de Castelló" 2023/2024

Consultar más información en la sede electrónica

Huertos urbanos


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Banco de Tierras

La creación del llamado “Banco de Tierras de Castellón” (BTCS) es una iniciativa promovida desde la Delegación Municipal de Agricultura y Medio Ambiente, con la que se intenta frenar la pérdida de superficie agraria útil a través de la puesta en valor de terrenos de cultivo perdidos o insuficientemente aprovechados, al mismo tiempo que intenta dar solución a la creciente y cada vez más importante problemática agroambiental derivada del abandono de los campos: riesgos de incendios, erosión del suelo, degradación paisajística, proliferación de plagas, roedores, etc..., contribuyendo, asimismo, al mantenimiento del paisaje agrario del término municipal y a la preservación de la tradición y prácticas agrícolas locales.

 

>> Banco de Tierras de Castellón, creación y funcionamiento.

banco de tierras

Alimentación es Salud


 

La Concejalía de Transición Ecológica se ha adherido a la campaña Alimentación es Salud, una iniciativa de la Red de Ciudades por la Agroecología iniciada durante la pandemia para concienciar en hábitos saludables y avanzar en sistemas agroalimentarios más saludables.

Castelló se ha sumado este año a la Red de Ciudades por la Agroecología para compartir experiencias que impulsan modelos agroalimentarios sostenibles y respetuosos con el medio natural. Dentro de esta plataforma se desarrolla Alimentación es Salud.

Comer bien garantiza salud, genera consumo de proximidad y ocupación en nuestro sector primario y cuida del territorio. La campaña recomienda un mayor consumo de frutas y verduras de temporada, priorizar la ganadería extensiva ecológica, fomentar la compra a granel y evitar el despilfarro de alimentos.

La alimentación saludable es un derecho según la Organización Mundial de la Salud y que actualmente se afronta un contexto en que está cambiando el paradigma de la agricultura ante los retos por el incremento de población, el cambio climático y la afección en la salud de los productos fitosanitarios.

Según estudios de la Red de Ciudades por la Agroecología, uno de cada cuatro casos de cáncer están vinculados con una mala alimentación; mientras la obesidad ha crecido en España de 1987 a 2010 de un 7% al 22% y un 85% de niñas y niños no comen fruta y verdura a diario.

La agroalimentación sostenible y la conservación del territorio son esos estratégicos de los fondos de reconstrucción, de la nueva Política Agraria Común de la Unión Europea y de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles de la Organización Mundial de la ONU.