10/01/2017

La concejala socialista Sara Usó, edil de Fiestas y presidenta del Patronato Municipal de Fiestas, hace balance de la cabalgata de Reyes de 2017, en la que la seguridad ha sido clave sin, por ello, deslucir el desfile.

La Cabalgata de Reyes Magos de 2016 ha sido diferente por muchos motivos. Y para bien. Hacer compatible la seguridad con la tradición, la ilusión y el disfrute del público era un reto que se ha superado con nota. El Patronat Municipal de Festes y la Junta de Festes, organizadora del evento, han trabajado como siempre desde el respeto y la colaboración máxima para que todo saliera a la perfección.

La llegada de Sus Majestades de Oriente al puerto, como es tradicional, abrió una cabalgata que se ha diferenciado de las de años anteriores. Más animación en los séquitos de Melchor, Gaspar y Baltasar, que este año han estrenado un vestuario a la altura de la celebración. Este año además se ha optado por recuperar el paso de las carrozas por la calle Mayor pero con las máximas garantías de seguridad para el público, por lo que se optó por restringir el lanzamiento de caramelos desde las carrozas. Una decisión acertada y aceptada.

Gracias a las (muchas) personas que han hecho posible esta cabalgata. Por su trabajo, por su dedicación, por su participación, por su entrega… porque han hecho posible el evento del año en el que más ilusiones depositan, especialmente los más pequeños. Es la noche más mágica y esperada, y la cabalgata ha estado a la altura.

Ahora es momento de hacer balance, de lo que se ha hecho bien y de lo que se puede mejorar. Porque, sin duda, tanto en el Patronat de Festes como en la Junta de Festes compartimos una voluntad clara de mejorar cada año. Somos conscientes de que ha habido aciertos, de que la seguridad es un objetivo irrenunciable pero también sabemos que hay cuestiones por pulir y por mejorar. Nos ponemos a ello. Avant!